¿Qué son las Constelaciones Familiares?

Es una herramienta muy eficaz que nos permite acceder a la información de nuestro sistema familiar limpiando los patrones inconscientes no resueltos heredados de generación en generación.

Innumerables dinámicas familiares están tras los problemas personales, con esta herramienta, podemos ir a la raíz del asunto de una forma muy clara, visual y experiencial y lo que es más importante, nos muestra un camino de solución.

Se trata de mirar más allá de nosotros mismos, que somos parte de un “clan”, de un “sistema”, donde todos sus miembros están relacionados entre sí. Asuntos no resueltos en generaciones anteriores se muestran en nuestro presente, afectando por ejemplo, a nuestras relaciones, enfermándonos, pérdidas económicas, etc.

¿Cómo es una Constelación?

Es básicamente visual y espacial, se trabaja a partir de las imágenes que muestra la configuración familiar. Para poder realizar una Constelación hace falta un cliente con un asunto a resolver, un constelador que acompañe y guíe el proceso y elementos que puedan hacer de representantes de los miembros de la familia.

En los talleres de grupo son las personas que asisten al taller

En la sesión individual, se constela con “figurillas”, papeles, fieltros, etc.

Entrevista previa

El cliente cuenta cual es el asunto y qué necesita, es decir, cual sería un buen resultado. El constelador pregunta por los asuntos traumáticos de la familia: muertes tempranas, abortos, personas excluidas, pérdidas importantes, conflictos no resueltos, asuntos de guerra, etc.

Con todos estos datos, ya se puede empezar y ver que personas del sistema son relevantes.

La Constelación

El Constelador le propone al cliente que elija representantes para los familiares que se requieran y que los configure en el espacio. En dicha configuración se pueden ver los lugares, las distancias, las cercanías, y hacia donde va la mirada de cada representante.

La Resolución Final

A través de frases, actos de reconocimiento, de respeto y honra a los excluidos o no reconocidos del sistema, a través de cambios de lugar, el reestablecimiento del equilibrio roto, se consigue que el sistema se sienta bien y que cada representante encuentre la paz.

La solución viene cuando se ordena el sistema y el cliente ocupa el lugar que le corresponde. Cuando se restaura la Ley de que todos tienen derecho a un lugar y a un reconocimiento del vínculo amoroso con los padres.

Efectos de una Constelación

La Constelación acaba con una imagen de solución, que por si misma inicia un movimiento en el sistema. En muchos casos se constata como estas imágenes tienen efecto en los clientes y también en las personas de su sistema que no han presenciado la Constelación. Es importante que las personas que han hecho una constelación dejen de lado sus teorías y sus imágenes internas y que se abran a la nueva imagen sin expectativas. De esta manera uno deja que el movimiento se despliegue sin obstaculizar con interpretaciones ni análisis sobre lo ocurrido.

¿A quién interesa?

Interesa a personas que quieran trabajar y buscar soluciones para asuntos problemáticos de su vida, ya sean dificultades en sus relaciones (asuntos de pareja, relación padre-hijo, asuntos laborales, o bien enfermedades, tanto psíquicas como orgánicas, trastornos graves, pérdidas y duelos, adicciones, trastornos de alimentación, comportamientos destructivos y guiones y pautas de infelicidad, abusos, adopciones, abortos, etc.

Interesa también a todas las personas que se dedican a profesiones de ayuda, y/o se relacionan con asuntos familiares (psicólogos, asistentes sociales, educadores, maestros, consejeros, mediadores, médicos, jueces, consultores, etc.) para que puedan aprendes el enfoque sistémico y las enseñanzas que sean útiles en su ámbito. Finalmente, interesa a cualquier persona con afán de aumentar la compresión de sí misma y de sus seres queridos a la par que entender la naturaleza sistémica de las relaciones. Y descubrir las fuerzas creadoras que nuestra red familiar entraña.